Por Nicolás Marchiori
Finalmente, la Argentina ya cuenta con la tan ansiada Ley Bases. Los senadores de la Renovación Neo tuvieron un rol decisivo para garantizar la sanción de una herramienta legislativa fundamental para el gobierno de Milei. Tras el frustrado intento desestabilizador de la oposición, el Gobierno de Misiones recupera la centralidad con una agenda enfocada en la gestión y la cercanía con la gente.
Vivimos en un mundo en donde las crisis se suceden sin interrupciones, la vida cotidiana se ha vuelto frenética y los elementos que la forman son tremendamente líquidos. Esta situación nos lleva a preguntarnos muchas veces si existe una salida a un escenario que pareciera estar signado por el caos permanente.
El emperador romano Marco Aurelio encontró en los postulados del estoicismo el mejor camino para alcanzar una buena vida y la auténtica felicidad. La filosofía estoica predica el valor de la razón, proponiendo que las emociones destructivas son el resultado de errores en nuestra manera de ver el mundo.
En efecto, el estoicismo se fija especialmente en las emociones, a las que se refiere como pasiones, y que divide en buenas, malas e indiferentes. Las buenas hay que potenciarlas, las indiferentes obviarlas y hay que lidiar con las malas. Esta corriente filosófica sostiene que a las personas no las perturban las cosas que suceden sino las opiniones que tienen sobre esas cosas que pasan.
En base a las referencias sobre Marco Aurelio, podemos afirmar que el objetivo de los estoicos no era otro que alcanzar la felicidad, un concepto denominado eudaimonia. A ella se puede llegar a través de la virtud moral (areté) o de la serenidad (ataraxia).
Ahora bien, la virtud en los estoicos tiene que ver con la excelencia y con alcanzar el potencial al que se está destinado. Para ello, se deben destacar cuatro cualidades: la sabiduría, la justicia, el coraje y la disciplina.
Por su parte, al hablar de ataraxia, el estoicismo hace referencia a una suerte de serenidad mental que permite que las emociones negativas no dominen y de esta forma sea más fácil actuar con virtud. Según los estoicos, las reacciones emocionales frente a situaciones negativas provocan una percepción distorsionada de la realidad, ya que se tiende a confundir pensamientos con hechos. Esto es inevitable que termine llevando a un estado de agitación y perturbación mental de las personas.
Otro término que surge del estoicismo y que adquiere gran relevancia es la “dicotomía del control” que, cabe destacar, ha ido evolucionando desde los orígenes de esta corriente filosófica hasta la actualidad. Este concepto refiere a conocer qué cosas están dentro del control de cada uno y cuáles no. Dentro de las primeras se encontrarían las opiniones, juicios o acciones que se adoptan y allí es donde habría que focalizar la atención teniendo en cuenta que existen otras cosas que no se pueden controlar. Séneca sostenía que “el hombre sabio se preocupa por la intención de sus acciones, no por sus resultados”.
Volviendo a la actualidad, nos preguntamos ¿Es posible alcanzar la paz social en un mundo atravesado por la violencia y el odio desmedido?
Debido a la complejidad que constituye pretender resolver las dificultades desde su origen, debemos tener en cuenta que se trata de un proceso continuo e interdependiente. La paz social está vinculada a la convivencia tolerante en comunidad, a la justicia y a un Estado que garantice la satisfacción de necesidades básicas y brinde igualdad de oportunidades a sus ciudadanos.
Lo que está claro es que se hace imposible pensar en la paz social cuando un sector de la dirigencia, de manera irresponsable y especuladora impulsa la descalificación, la violencia y la siembra de la discordia con el objetivo mezquino de sacar rédito político a cualquier costo. Las reglas de la democracia, imponen que quien resulta vencedor en las urnas es quien gobierna, aunque a algunos les cueste entender y no puedan digerir su eterna propensión a la derrota.
Recuperar la centralidad con solvencia y certidumbre
En la última semana se pudo observar totalmente fortalecido a todo el esquema Renovador Neo, luego de superar sin sobresaltos la intentona desestabilizadora de una oposición que intentó ocultarse detrás de un reclamo salarial de los empleados estatales y terminó enredada en su propia torpeza. Los principales referentes opositores se vieron envueltos en un espectáculo con ribetes tragicómicos que desnudó los altísimos niveles de improvisación y falta de coordinación de lo que resultó siendo una burda operación a cara descubierta que los tuvo como instigadores y financistas del caos.
Lo cierto es que un Passalacqua muy activo recuperó la centralidad de la agenda pública, encabezando reuniones y participando de actos en diferentes municipios de la provincia, dejando en claro una vez más que el sello distintivo de la Renovación Neo es la cercanía con la gente y las gestiones incansables para llevar soluciones a todos los misioneros.
El hecho más relevante tuvo lugar el viernes cuando se llevó a cabo una reunión en donde se realizó la entrega de fondos a los 78 intendentes para impulsar la reactivación de las obras de infraestructura en cada uno de los municipios.
Por otra parte, en la semana entrante Misiones se convertirá en una de las primeras provincias del país en pagar el aguinaldo. Se trata de una inyección de más de 200 mil millones de pesos que movilizarán toda la economía de la provincia.
El Gobierno Provincial también prepara un incremento salarial que será entre tres y cuatro veces más alto que la inflación de mayo en Misiones, para darle continuidad a la recuperación del salario de los trabajadores del sector público.
El rol vital de la Renovación Neo para la sanción de la Ley Bases
Finalmente, el miércoles pasado el presidente Milei logró obtener la sanción de la tan mentada Ley Bases, una herramienta fundamental para su gestión.
Una vez más, la Renovación Neo dio muestras de coherencia y seriedad política en la votación llevada a cabo en el Senado de la Nación. Con un escenario muy cerrado e incierto, los votos de los dos senadores misioneros fueron fundamentales para la aprobación de la ley. Los representantes de la provincia inclinaron la balanza hacia lo que prefiere la mayoría de la ciudadanía, impidiendo la vuelta al pasado.
A pesar de la incertidumbre de un vasto sector de la sociedad respecto al rumbo del gobierno de Milei, una gran mayoría no quiere volver hacia atrás con modelos que fracasaron: tanto el kirchnerismo como Juntos por el Cambio.
La Renovación Neo cumplió con su responsabilidad y votó en pos de garantizar la gobernabilidad. Ahora el presidente cuenta con la herramienta que solicitó para sacar al país adelante. En efecto, todo lo que ocurra con el futuro de la economía será responsabilidad de la Nación.
Los antecedentes demuestran que la provincia siempre tuvo conductas responsables y democráticas tendientes a garantizar la gobernabilidad de los presidentes, sin importar el color político, nunca puso palos en la rueda. Esa coherencia política de la que hace gala la Renovación Neo es la que le faltó al radicalismo, al PRO y al puertismo segunda edición que siempre se mostraron críticos a los supuestos superpoderes en el ámbito provincial pero ahora aplauden el otorgamiento de facultades delegadas al Presidente de la Nación.
El oportunismo político siempre pasa factura
En la actualidad, una mirada panorámica de la política en general nos permite vislumbrar la proliferación de falsos liderazgos que utilizan a los espacios políticos como medios para alcanzar el poder y así satisfacer sus necesidades personales.
En nuestra provincia, las acciones llevadas a cabo por dirigentes de partidos tradicionales y de espacios reciclados que por la propia dinámica biológica abren paso a una segunda generación que comienza a vivir en carne propia la demoledora sensación de impotencia de no poder torcer la voluntad de un pueblo que decidió cerrar aquel libro que registraba en sus páginas los capítulos más oscuros de la historia de Misiones. Los ‘90 ya pasaron y jamás volverán, porque los misioneros así lo han dispuesto.
Viejas mañas y artilugios inescrupulosos fueron sepultados para siempre, porque la gente así lo decidió. Pero en la era tecnológica, podemos ver a diario cómo la circulación de afirmaciones totalmente falsas y difundidas a través de las redes sociales pueden manipular opiniones públicas y desviar el curso de los votos en los procesos electorales. Ese es el verdadero fraude contemporáneo.
De manera cotidiana, observamos cómo estos sectores de la política local se desvelan por hacerse del poder, pero nada dicen acerca de qué harían para cambiar lo que critican si alguna vez se toparan con la inmensa responsabilidad de gobernar.
El genuino reclamo de algunos sectores de trabajadores misioneros que han sufrido el cimbronazo de la crisis económica nacional fue desvirtuado groseramente y terminó convirtiéndose en una protesta hiperpolitizada desde algunos sectores políticos opositores que, envueltos en un mar de contradicciones y en su propia torpeza, quedaron expuestos. Lo cierto es que está a la vista de todos quienes fueron los instigadores y ahora se recluyen al mundo digital para buscar reinstalar desde sus redes sociales temas que fueron parte de su narrativa electoral en las pasadas elecciones del 7 de mayo en donde los misioneros expresaron con nitidez sus preferencias. Ese contundente mensaje de las urnas en Misiones causó un profundo silencio y encierro por parte de la dirigencia opositora de la provincia, que no felicitó al ganador ni reconoció el resultado como lo que realmente fue: un verdadero ejemplo de ciudadanía y democracia.
Los casi 300 mil votos de diferencia, que se reflejaron en 45 puntos de diferencia entre el modelo de gestión 365 impulsado por la Renovación Neo y la propuesta del extinto Juntos por el Cambio que sólo se reducía a producciones fotográficas y audiovisuales, acompañadas de una campaña de marketing poco efectiva y mucho menos convincente demuestra cuál ha sido la preferencia del pueblo misionero. Pese a quien le pese.
La incoherencia política de algunos personajes de la oposición vernácula se hace visible en cada uno de los discursos lanzados con un grado de cinismo absoluto. Tal es así que entre un sinfín de ejemplos, quienes vitoreaban la motosierra a nivel nacional con un recorte descomunal de los gastos del Estado, fueron los que a nivel local fogoneaban un reclamo de aumento de salarial en el sector público del 100%.
La nula capacidad de autocrítica, la imposibilidad de entender el verdadero sentir social y la permanente falta de propuestas coherentes y concretas, son algunos de los factores que arrojan como resultado una oposición que no es más que un rejunte de voluntades incapaces de generar las condiciones necesarias que permitan la aparición de un liderazgo con solvencia y capacidad. El largo letargo de la oposición es producto de las mezquindades, el oportunismo y la falta de coherencia política de sectores sin un norte claro. Ejemplos sobran, quizás el más emblemático sea el de las últimas elecciones internas del radicalismo que logró captar la atención de apenas un millar de afiliados dejando como postal establecimientos educativos desolados.
El autor es Abogado. Diplomado en Manejo de Crisis y en Análisis de Procesos Electorales. Especializado en Comunicación de Gobierno y Electoral. Becario de la Fundación Konrad Adenauer (Alemania) y del Centro de Análisis y Entrenamiento Político (Colombia).