Por Cinthia Sandoval Arija
La política tiene sus propios períodos intergenésicos entre elecciones y los debates que confluyen en constantes análisis por especialistas que intentan explicar una suerte de multiverso político (muy bien definido por María Esperanza Casullo) para argumentar la incertidumbre que reina estos días en nuestro país.
Frente a este escenario de incertidumbre en el que nadie puede prever con certeza lo que deparará el futuro, es fundamental la creación de espacios de debate. Estos no solo cumplen la función de arrojar claridad sobre los hechos actuales, sino que también se convierten en oportunidades valiosas para el desahogo intelectual, permitiendo que las inquietudes y reflexiones encuentren su salida a través del análisis y el debate.
Uno de estos espacios se materializó durante el Conversatorio titulado “Comunicación Política y Narrativa en tiempos electorales”, organizado por el AteNEO en la Facultad de Humanidades y Ciencias Sociales de la Universidad Nacional de Misiones. En esta instancia, el enfoque analítico se concentró en los discursos elaborados por los diversos dirigentes que compiten por la presidencia, y resulta ineludible extrapolar estas reflexiones a la realidad de nuestra provincia.
Cuando se comienza a destejer los hilos narrativos de los discursos y las estrategias electorales de los diferentes candidatos, se hace evidente que los representantes de partidos tradicionales, como la Unión Cívica Radical, se encuentran ausentes en un contexto en el que la sociedad exige mucho más que meras repeticiones y propuestas concretas.
Juntos por el Cambio no puede disimular sus propias grietas, lo que le impide transmitir una narrativa coherente y unificada. De hecho, su relato puede llegar a ser confuso y contradictorio.
En este trayecto que nos queda por delante, en el medio de los debates y percibiendo las elecciones tan próximas, los mensajes impactan más sensiblemente en la ciudadanía.
La sociedad no tiene el humor social para relatos ucrónicos por parte de Juntos por el Cambio.
Ante a una realidad con un sinfín de temas urgentes por resolver, se evidencia el intento de JxC por imponer una narrativa que no interpreta las necesidades del electorado.
En nuestra provincia, la estabilidad se refleja en un proyecto político que brinda previsibilidad y garantiza la defensa de los intereses de los misioneros. Esta última perspectiva es la narrativa central del Frente Renovador de la Concordia Social.
Nos encontramos en una época en la que las percepciones y las impresiones sobre el futuro de nuestro país adquieren una importancia cada vez mayor. Estas sensaciones se infiltran en la vida cotidiana de cada ciudadano argentino con mayor intensidad y nos instan a reflexionar y analizar con una mayor urgencia con el rigor de la cercanía de las elecciones.
Por lo tanto, los espacios de debate y participación que fomentan la innovación social, como el AteNEO, donde la libertad de expresión y la posibilidad de hacer preguntas están garantizadas, nos permiten transitar esta previa electoral.
El último debate presidencial del próximo domingo marca, de a poquito, el fin de este período intergenésico político. Y con el correr de las semanas, nuestro país alumbrará un nuevo gobierno que deberá sobrevivir a sus propios discursos electorales.