Distintos bloques opositores votaron de forma negativa al proyecto presentado por el oficialismo para el ejercicio 2022. En una muestra de mezquindad y buscando un ínfimo rédito político, el rechazo al Presupuesto 2022 tiene como consecuencias la no implementación de importantes partidas conseguidas por las provincias. En el caso de Misiones, significa dejar de lado beneficios por casi 100 mil millones de pesos en obras públicas, así como significativos subsidios al transporte y la implementación de la Zona Aduanera Especial. Los representantes misioneros de Juntos por el Cambio pusieron su granito de arena, dándole la espalda a su provincia.
Luego de una maratónica sesión, esta mañana la Cámara de Diputados de la Nación rechazó por 132 votos a 121 (y una abstención) el proyecto de Presupuesto 2022 enviado por el oficialismo. El Frente de Todos introdujo modificaciones al texto original y seguía abierto a incluir enmiendas al documento final. Pero primó más la mezquindad y el destacarse como el más opositor, puro obstruccionismo.
Las negociaciones previas incluyeron modificaciones beneficiosas para Misiones, que luego de negociaciones entre el gobernador Herrera Ahuad y los legisladores del Frente Renovador (con un destacado papel del diputado Diego Sartori) incorporaron un paquete de inversiones por casi cien mil millones de pesos y la implementación de la Zona Aduanera Especial. Del mismo modo, gracias a una posición común de las provincias del Norte Grande, se había logrado incluir en el proyecto sustanciales aumentos de subsidios al transporte público, con el fin de equipar los precios que se pagan en esta región con los de la zona metropolitana de Buenos Aires.
Juntos por el Cambio, el Interbloque Federal; integrado por nombres como Randazzo, Camaño, los cordobeses que responde a Schiaretti y los socialistas santafesinos; el FIT; y los libertarios (en el rechazo al presupuesto coincidieron posiciones de izquierda como la de Myriam Bregman con las de ultraderecha como las de Javier Milei) fueron los artífices de dejar sin Presupuesto al país para el próximo año.
Capítulo especial para los misioneros de JxC, Alfredo Schiavoni del Pro, y los debutantes Martín Arjol y Florencia Klipauka de la UCR le dieron la espalda a su provincia y eligieron seguir el mandato de su espacio a nivel nacional. Prefirieron la grieta a Misiones.
No se puede decir que exista sorpresa alguna, en la última campaña electoral, Juntos por el Cambio anticipó sus planes: oponerse a todo lo que proponga el gobierno nacional, y dos ejes centrales de su propuesta se verán en acción en el futuro próximo. Los diputados misioneros que responden a los designios de sus mandantes fuera de Misiones, avanzarán con la ley de despidos y la flexibilización laboral. Los intereses del pueblo misionero no están incluidos en su agenda.
A 20 años de la caída del gobierno de Fernando de la Rúa, una nueva versión neoliberal acecha a nuestro país. Algunos nombres han cambiado, otros se han reciclado, exhiben una virulencia renovada, pero los objetivos son los mismos: defender a rajatabla los intereses de los sectores concentrados, dándole la espalda a las provincias y fortaleciendo el esquema centralista que tanto daño hizo en la historia argentina al federalismo de las provincias.