Por Cinthia Sandoval Arija
Comenzábamos la semana releyendo necesariamente a Murray Rothbard para explorar teóricamente los conceptos ofrecidos por la escuela austriaca de economía, para finalizar el jueves con una percepción que se publica un “Segundo Tiempo” de Macri.
Desde los resultados del domingo en el ballotage hasta las últimas horas, los cambios y reemplazos en los discursos y la identidad de quienes integrarán el gabinete nacional insinúan que el entusiasmo libertario fue apresurado. En lugar de presenciar la partida de la casta, parece que ésta no solo no se ha retirado, sino que está tomando el control de manera casi absoluta.
La neblina post electoral se desvanece, dejando al descubierto caras conocidas que ya han ocupado cargos a nivel nacional y que fueron responsables de políticas gubernamentales cuyos efectos resienten nuestras economías en la actualidad.
Esos viejos conocidos asumirán roles estratégicos que reflejan la consolidación del poder político por parte de Macri, mientras que las medidas de ultraderecha, que se venían anunciando, están perdiendo sustancia y credibilidad a medida que transcurren las horas.
Presenciamos un hecho inédito: se están produciendo cambios en el gabinete antes de que el nuevo gobierno asuma oficialmente, lo que podría significar una pérdida del capital político acumulado durante estos meses de campaña.
El retorno de Macri al escenario político, desde una posición que no alcanza la responsabilidad legal, desintegra la plataforma electoral de Milei y lo sitúa en una fachada que se desvanece con el transcurrir de las horas. Los argentinos enfrentamos casi con normalidad la incertidumbre y la sensación de un futuro distópico.
En contraste con la inestabilidad e incertidumbre a nivel nacional, nuestra provincia se destaca como un estado inteligente que toma decisiones con la premisa de continuar una gestión cercana a los misioneros y misioneras.
Las políticas públicas implementadas en nuestra provincia se ven reflejadas en los resultados del Censo 2022, destacando que la mayoría de la población misionera reside en viviendas particulares con condiciones adecuadas. En términos de estructura de hogares, un 76,1% de la población habita en viviendas de su propiedad.
Frente al tumulto a nivel nacional, Misiones proyecta serenidad y confianza a través del modelo misionerista, que coloca en primer plano los intereses de la provincia con la población más joven del país.
Nos toca transitar estos días con la tranquilidad de contar con un gobierno provincial que dará continuidad a las políticas públicas centradas en mejorar la calidad de vida, pero desde un enfoque donde prevalezca el diálogo y el consenso.
La experiencia acumulada por el Frente Renovador de la Concordia Social ante un nuevo gobierno nacional, y la juventud de los representantes misioneros, configuran el modelo de gestión que brinda certezas y seguridad en medio de la convulsión que atraviesa el país.